TENDRA UN MAL VERANO

El presidente de la Junta de Andalucía tendrá un mal verano. Sabiendo cómo le afectan los asuntos relacionados con la corrupción en su partido, debe estar pasando un trago bastante anargo. Hasta la prensa nacional ha publicado ya que sus hermanos y familiares de Felipe González están involucrados en adjudicaciones de obras o servicios públicos no del todo claras, a las que habrían optado precisamente aprovechando la vinculaciòn familiar con el presidente de la Junta. ¿Son verdad? ¿son un infundio de sus enemigos? En esta sociedad mediática, en la que los medios de comunicación marcan la pauta social y polìtica, el daño está hecho desde el momento en que se publica el rumor. Y como quienes están relacionados con la sospecha son familiares directos o amigos, es seguro que salir de este embrollo tendrá un coste importante para él: de esta situación, sólo se sale perdiendo.
Chaves es un político respetado y valorado, entre otras cosas, por su honradez en la gestión, por su voluntad de transparencia. Se enteró por la prensa del desaguisado. Pero la polìtica es lo que es, y esta vez tendrá que dar explicaciones; mejor si lo hace en el Parlamento y sin que medie demasiado tiempo.
Paco Rosell, director de la edición andaluza del diario El Mundo, ha encontrado un filón y, dado su enemistad con Chaves, removerá y extenderá este oscuro asunto cuanto pueda para perjudicarle. Rosell no olvida que el presidente de la Junta le puso una querella; está acostumbrado a perder y esta vez querrá sacar tajada, con el apoyo de sus incondicionales del Partido Popular en Andalucía.
Le quedan -a Chaves- unas vacaciones con poca tranquilidad en La Antilla este verano, sospecho.